Manuel Martín Alzás.
c.e. manuelmartina@telefonica.net
INTRODUCCIÓN
Ya CROWSON (1955) subdividía la superfamilia Crysomeloidea en tres familias entre las que se encuentra la Cerambycidae, en la que se incluye el género Cerambyx (Linnaeus, 1758), de amplia distribución paleártica. En la península se han citado cuatro especies C. cerdo (Linnaeus, 1758), C. welensii (Küster, 1846), C. scopoli (Fúessly, 1775) y C. miles (Bonelli, 1823). Todos ellos incluidos en la Tribu CERMBYCINI (Latreille,1802), de distribución casi cosmopolita.
Aunque la espacie está recogida en el Anexo II del Convenio de Berna (1979), en ocasiones, y en lo que respecta al suroeste peninsular, se plantean dudas sí verdaderamente debe protegerse (AUSTRICH, 2016 y MANNU, 2021). De hecho, los trabajos más abundantes se refieren a los daños producidos sobre el arbolado de Quercus sp (MARTÍNEZ DE MURGUÍA, 2007 y VICENTE-CALLE, 2013).
En lo que respecta para Extremadura destacan los trabajos de GARCÍA-VILLANUEVA (2007) y TORRES-VILA (2012, 2021,2022), en los que se muestra la distribución, afectación de las Quercíneas y parasitoides, tanto de la especie como de su congénere C, welensii.
En este trabajo se estudia la población de la especie en 18 hectáreas de dehesa del suroeste extremeño, durante los meses de mayo a agosto de los años 2021 y 2022.
MATERIAL Y MÉTODO
ÁREA DE ESTUDIO
La dehesa estudiada se sitúa en la Baja Extremadura, entre 38º 31 de latitud norte y ´6º 52´de longitud oeste, quedando rodeada por otras áreas adehesadas (figs. 1 y 2).
Fig. 1: situación de la dehesa
Fig. 2: Área de estudio
Además de las encinas, aparecen algunos alcornoques situados hacia el este del área. Las encinas se distribuyen de forma dispersa, aunque en ciertas zonas se muestran más densas. Hay que hacer notar que se trata de un encinar joven poco sometido a podas y dividido en dos cercas de aproximadamente 6,13 y 10,23 hectáreas, respectivamente. Acompañando a las quercíneas aparecen retamas (R. sphaerocarpa) y distintos matorrales del Género Quercus (sobre todo Q. coccifera). Para definir el arbolado se planteó un muestreo aleatorio en el que se tomaron medidas de la altura hasta la cruz y del grosor a unos 80 cms del suelo (49 encinas con alturas medias de 165, 47 cms y grosores mediaos de 108,84 cts. y tres alcornoques con 211,67 cts. de altura y 116,67 cts. de grosor. En los claros del encinar-matorral se instalan áreas de pradería. En toda la superficie estuduada pasta un rebaño de ovejas.
METODOLOGÍA AÑOS 2021 y 2022
Las trampas usadas consistieron en una botella de plástico de cinco litros, cortada transversalmente a la altura de aproximadamente 20-21 cms. El trozo superior se invierte para que quede como un embudo y a unos 5 cms. del fondo se coloca una maya que impide el contacto de los insectos capturados con el atrayente Fig.2.
Para los muestreos de 2021 se seleccionaron seis zonas Rincón, Piedras, Casa, Hacia este, Simpático y Castillo en las que se colocaron 23 trampas. La distribución de las trampas fue la siguiente: rincón (2); Piedras (2); simpático (2); casa (3), hacia este (1) castillo (7), la zona denominada castillo se amplió en el mes de julio y se denominó noroeste castillo (albergando otras seis). En la temporada de este año hicimos 8 visitas en mayo, 39 en junio, 93 en julio y 84 en agosto.
En el año siguiente (2022) se seleccionaron diez zonas de la misma dehesa en la que se colocaron 45 trampas, cuatro de las zonas seleccionadas fueron coincidentes con las del año 2021 (Piedras, Casa, Camino y Castillo), aunque con distintos números de trampas instaladas. Las zonas seleccionadas fueron camino casa, piedras, casa, camino- rincón, castillo, acebuche, pared cerca II, sortín cuatro, pared umbela y alcornoques con 6, 3, 4, 5, 5, 5, 4, 5, 5 y 3 trampas respectivamente (fig. 3). Las revisiones de las trampas se extendieron entre el 16 de mayo hasta finalizar agosto, de forma que en la segunda quincena de mayo se hicieron 59, en junio 151, en julio 101 y en agosto 88.
Las trampas se instalaron en la primera quincena de mayo y periódicamente se fueron revisando, de modo que en la 2ª quincena de mayo se hicieron 59 visitas, en junio 151, en julio 101 y en agosto 88, total 399 visitas a las trampas.
Fig. 3: Distribución de trampas en las dos temporadas de muestreo
La reposición de atrayente se hizo con períodos diferentes dependiendo de la evaporación sufrida en cada trampa, resultando ser con un intervalo de 12 días de media por trampa.
En los muestreos de este período, los ejemplares vivos se marcaron con un rotulador permanente de color blanco sobre los élitros, con el que se puso un número, en el izquierdo las decenas y en el derecho las unidades. Una vez marcado el ejemplar se soltó a unos 20 metros de la trampa de captura, con el objeto de que no volviera a la misma. Para cada ejemplar marcado se anotó su número, la fecha de marcado, la zona y la trampa de captura.
RESULTADOS.
Los datos los presentamos según períodos de quince días, tal como hemos considerado los distintos registros obtenidos en las respectivas trampas instaladas en ambas temporadas. De esta forma, los presentamos en las figuras 2, 3 y 4.
REGISTROS QUINCENALES
Teniendo presente el cómputo total de trampas dispuestas en ambas temporadas, se desprende que los mayores registros se alcanzan entre pasado el 15 de mayo y antes de alcanzar el 15 de agosto, alcanzando los máximos entre el 15 de junio y el 15 de julio.
Fig. 2: Registros quincenales.
REGISTROS ACUMULADOS
Con el objeto de aproximarnos a la población de este longicornio en la dehesa estudiada se elaboraron las curvas de acumulación, de las que se desprende que la población en la temporada de 2022 parece contar con más efectivo, aunque hay que tener en cuenta que el número de trampas y su distribución fue más grande. De todas las formas, ambas curvas nos muestran que se alcanzan los máximos a partir de la segunda semana de julio, permaneciendo constante hasta final de agosto.
Fig. 3. Registros por quincenas
La población adulta de C. cerdo en ambas temporadas de muestreos alcanzó máximos en la segunda semana de junio (2022) y en la primera de julio (2021). Seguramente el adelanto de emergencias en la segunda temporada sea debido a las altas temperaturas alcanzadas en primavera del año 2022, que, en la citada dehesa y en la temporada de emergencia de adultos, se alcanzaron valores de temperaturas máximas entre 24 y 40 grados centígrados a diferencia de las obtenidas en el año anterior que fueron más bajas.
Fig. 4: Presencia de adultos/quincena
EJEMPARES RECAPTURADOS (2022).
Sólo se recapturaron 3 individuos de los 57 marcados (menos del 1% por lo que la tasa de recuperación es muy poco significativa. Consideramos que la población de este cerambícido en el área estudiada no es estable y los ejemplares que se capturaron consideramos que están de paso. En la siguiente tabla presentamos el resumen de las recapturas, donde puede comprobarse que el único ejemplar que ha permanecido más tiempo en la dehesa fue el marcado con el número 13 que se movió por la dehesa hasta morir (como se resume en la siguiente tabla).
EJEMPLAR Nº | MARCADO EN Y FECHA | 1ª RECAPTURA EN/ FECHA | 2ª RECAPTURA EN/ FECHA |
13 | PIEDRAS-2/ 09-06 | PC II-4/07-07 | PCII-4/19-07 MUERTO |
41 | PIEDRAS-2/ 25-06 | AC-5/ 30-06 | |
42 | PC II-3/30-06 | PC II-3/01-07 |
CONCLUSIONES.
Consideramos que C. cerdo en la dehesa estudiada no se reproduce, ni encuentra lugares adecuados para completar su ciclo de vida. Eso es debido a la composición del arbolado, es decir, los individuos que llegan se encuentran con encinas jóvenes.
Dada la juventud del encinar, los cerambicidos no encuentran sustratos adecuados para realizar la puesta y el desarrollo del ciclo de vida.
BIBLIOGRAFÍA
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- Carmen Morales-Rodríguez, Álvaro Sánchez-González, Yolanda Conejo-
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- Luis Miguel Torres-Vila, Francisco Javier Mendiola, Rafael López, Álvaro Sánchez, Francisco Ponce, Félix Fernández, Carlos Zugasti, José M. de-Juan, Emilio Echevarría-León,Yónatan Cáceres3 & Mercedes París. Distribución actualizada del género Cerambys Linnaeus, 1758 Coleoptera Cerambycidae) en Extremadura: desde los registros históricos al muestreo a escala regional. Boletín de la SAE nº 31 (2021): 169-171.
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- Vives, E. 2007. Coleoptera Cerambycidae. M.N.CC.NN. Madrid.
BIOLOGÍA Y PROTECCIÓN LEGAL
Esta especie fue incluida en el Anexo II del Convenio de Berna de 1979 relativo a la conservación de la vida silvestre y del medio natural en Europa, en la categoría de especies de fauna estrictamente protegidas. Según la IUCN, es una especie vulnerable. También la Directiva de Hábitats considera esta especie de interés comunitario de tal forma que requiere una protección estricta (Anexo IV). A nivel nacional, Cerambyx cerdo no está incluida en el Catálogo Español de Especies Amenazadas pero sí en Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial. La menor preocupación legislativa a nivel nacional con respecto a la normativa internacional obedece a su presencia más frecuente en las latitudes mediterráneas que en el centro y norte de su área de distribución, llegando en algunas ocasiones a causar daño al arbolado, como en Mallorca. En las dehesas del oeste de la Península ibérica la especie dañina no es Cerambyx cerdo, sino su congénere Cerambyx welensii.